viernes, 11 de marzo de 2016



LA PROCESIÓN.


La procesionaria del pino.







Además de los parásitos externos que pueden afectar a nuestros perros, y de los que hablamos en nuestra sección Salud, existen otros animales que pueden ser peligrosos para ellos, no tanto por el efecto patológico propiamente dicho sino por la reacción particular del perro al agente tóxico. Este sería el caso de la oruga procesionaria del pino.


CARLOS RODRÍGUEZ
Veterinario



No solo las pulgas, las garrapatas y los mosquitos pueden atacar a nuestros queridos animales de compañía, sino que existen multitud de especies animales que pueden ocasionar daños de distinta gravedad tras inocular sus toxinas en el organismo de nuestra mascota.


En muchas ocasiones el efecto patológico no es producido por la mayor o menor capacidad tóxica del agente inoculado, sino que las reacciones alérgicas a las sustancias pueden ser uno de los efectos indeseables que aparecen con mayor frecuencia.






                    Efecto producido por la procesionaria del pino.


Por desgracia, no podemos saber qué efecto causará una picadura en nuestro animal hasta que el agente tóxico le haya sido inoculado; por ello, lo más adecuado es conocer qué tipo de seres vivos pueden atacarles, cuáles son sus efectos y, lo más importante, cómo prevenir estas situaciones.


Entre las especies que pueden causar daños están los lepidópteros, y dentro del  orden Lepidoptera encontramos una especie conocida en nuestro país, la Thaumetopoea pityocampa o procesionaria del pino, “cic de pi” en Cataluña, “sirganos” en Teruel y “piñu-mozorro” en el País Vasco. 






Esta especie es conocida por desplazarse por el suelo formando hileras, así como por sus nidos en forma de “bolsas blancas” en las ramas de los pinos (aunque también pueden aparecer en cedros y abetos). Todas las especies de pinos pueden verse afectadas, pero las que más le gustan a la procesionaria son el pino laricio (Pinus nigra), el pino canario (Pinus canariensis) y el pino silvestre (Pinus silvestris)





      
                        Bolsones típicos de la procesionaria del pino.                   
La mariposa de esta especie típicamente mediterránea pone sus huevos sobre las agujas de los pinos y aproximadamente al mes salen las larvas, que empiezan a alimentarse y a construir sus nidos. Dichas larvas experimentan cinco mudas y con la llegada del invierno construyen su nido definitivo.


Cuando el clima es benigno las orugas comienzan a salir del nido y bajan por el tronco del árbol en una perfecta formación de “procesión”, de ahí su nombre. En Julio y Agosto nacen las mariposas, que son nocturnas y de una vida muy corta, unas 24 horas, aproximadamente.



  

                   Procesionaria en procesión por el suelo del bosque.



El perro se ve afectado si tiene contacto directo con la oruga o con los nidos que caen del árbol, ya que en su exterior existen pelos urticantes de las orugas. El tóxico que produce la reacción es una haloproteína, la traumatopeína, que necesita que los pelos urticantes se claven para ejercer su acción.


Entre los síntomas se puede apreciar inflamación edematosa de labios, cavidad bucal y cabeza. El animal se encuentra excitado, dolorido e intenta rascarse: también se produce una intensa hipersalivación o “babeo”.







Si el contacto se ha producido en la lengua del animal puede llegar a producirse una grave necrosis, que finaliza con pérdida de la porción afectada. Además, el animal no puede comer, por lo que puede ser necesaria la alimentación por vía parenteral, con sueros intravenosos. En los casos más graves se puede producir una reacción inflamatoria en la faringe, con dificultad respiratoria y muerte.


Como medida de urgencia hay que lavar la zona con agua templada, ya que el calor destruye la haloproteía, y llevarlo con urgencia al veterinario.






               Perro con la lengua necrosada por la procesionaria.




PREVENTIVAMENTE, se deben evitar los paseos durante la primavera por zonas de pinares en los que se observen nidos de procesionaria.












FUENTE: REVISTA “MI PERRO Y YO”, Nº 2, MARZO 2.013
REVISTA CORTESÍA DE ROYAL CANIN (EDICIÓN GRATUITA, PROHIBIDA SU VENTA).










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