jueves, 24 de octubre de 2013



LAS COMUNAS DE LOS LEONES Y LAS DE LOS SERES HUMANOS
Todos los adultos cuidan a los hijos





Una institución que se mantuvo durante mucho tiempo, allá por los años sesenta-setenta se llamó entre nosotros "comuna" o comunidad libre. Hoy día, esa "forma futura ideal de convivencia" se ha disuelto en sus propios placeres. Lo que los estudiantes llaman en la actualidad comunidad no tiene ya nada que ver con el sexo en grupo.






Sin embargo debemos plantearnos la siguiente pregunta: ¿Existe en el reino animal algo así como una comuna, en el sentido que tuvo en los años setenta entre los seres humanos? La respuesta es afirmativa y podemos encontrarla en los leones. Entre ellos ese sistema social funciona de modo excelente. Entre los hombres, sin embargo ese concepto ideal choca contra las insuficiencias de nuestra naturaleza.






El principal punto de choque son los hijos que vienen al mundo en una comuna. Entre los leones, todas las hembras se ocupan de todos ellos e, incluso, se dejan mamar igualmente por los hijos propios que por los ajenos. Los grandes machos melenudos juegan con el mismo cariño con todas las crías. 






En la comuna humana debía ocurrir, teóricamente, lo mismo. En la práctica, cada uno trataba de pasar el trabajo a los demás. Los hombres siempre tienen dificultades a la hora de aceptar responsabilidades colectivas. Consecuentemente en las comunas humanas los niños eran descuidados, física y espiritualmente. El egoísmo individual mata las más bellas ideas socialistas.






Lo que la propaganda nos ofreció como la forma de vida del futuro, no fue otra cosa más que una comunidad sexual libre y pre-matrimonial, una patente de corso para una orgía sexual de la post-pubertad. En todos los casos en que una comuna existió prácticamente, sin excepción alguna, sus miembros acabaron disgregándose en todas direcciones tan pronto alcanzaron la madurez y "estaban hartos" de sexo. Ningún pueblo de la tierra, ni siquiera los más primitivos, han elegido la comuna como forma de vida general y duradera.





En más de una ocasión he escuchado decir que los leones machos son unos vagos que se pasan el día comiendo y durmiendo ¡Nada más lejos de la realidad!. Los machos de una manada suelen estar formados por dos, tres y hasta cuatro individuos, que suelen ser hermanos o amigos que se han criado juntos.






El cometido de estos machos en la manada es defender a la misma de la agresión de otros machos foráneos que quieren adueñarse del grupo de leonas y matar a los machos residentes.  Por tanto los machos que cuidan de la manada, tienen que patrullar su territorio, que es bastante amplio, y marcarlo con su orina. Esto lo repiten varias veces al día.  Si este comportamiento de los machos es de "vagos", creo que es muy injusto sólo pensarlo. 






Si se analiza la conducta humana en sus comunas y la conducta animal en las suyas, la cosa está bastante clara: los humanos se escaquean de cualquier trabajo, mientras que los animales se lo toman muy en serio y trabajan todos los miembros de la manada (o comuna) por ese motivo las comunas humanas no han sobrevivido, que de eso se trata.







FUENTE: ¡APRENDAMOS DE LOS ANIMALES!

AUTOR: Vitus B. Dröscher, estudió zoología y psicología. Desde 1954 trabaja como escritor científico, principalmente sobre etología y psicología sensorial. Se ha convertido en el autor más famoso en temas relacionados con el comportamiento animal. Entre algunas de sus obras publicadas en España destacan los títulos:
Sobrevivir, Calor de hogar, La vida amorosa de los animales, La magia de los sentidos, y El sexto sentido de los animales.

El Sr. Dröscher está comprometido activamente en la protección del reino animal y las especies en vías de extinción. Sus programas en radio y TV y sus artículos en la prensa le han dado gran popularidad.


FLOR DEL VIENTO EDICIONES, S.A. (Barcelona)






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si tienes algún comentario no dudes en hacerlo. Gracias.