¿QUE HACEMOS CON LOS PELUDOS EN VACACIONES?

Nani Zubero


Yo, me quedo en Bizkaia, pero cuando un@ desea llevarse consigo animales de compañía o encontrar un lugar confortable y adecuado donde dejarlos, si tienen que quedarse, puede resultar una tarea difícil y extenuaste. A continuación se presentan distintas opciones pensadas para facilitarte la toma de decisiones con conocimiento de causa.

Por carretera. No des de comer a gatos o perros desde una hora antes de partir y lleva agua para las paradas. Coloca papel oscuro en las ventanas del vehículo, bien sujeto y nunca dejes perros y gatos sin vigilancia en vehículos aparcados o fuera de tu vista, especialmente en verano. Hay establecimientos que permiten la estancia de gatos y perros en las habitaciones. Búscalos y divúlgalos en tus círculos de amistades, familiares, vecinos y conocidos.

*Si viajas en automóvil con un gato, tenlo en una jaula de mimbre que debe ser robusta, bien ventilada, lo suficientemente grande como para que pueda levantarse y darse la vuelta cómodamente. Cubre el fondo con una toalla y una bandeja delgada para las deposiciones. La jaula debería tener una abertura para que puedas vigilar a su inquilino y que permita al animal verte a ti y el interior del vehículo, pero sin que pueda observar los vehículos que se acercan en sentido contrario o los destellos de los faros, que podrían asustarle.

Si es posible, asegura la jaula con un cinturón de seguridad. Unos días antes del viaje acostumbra al gato a merodear por el interior de la jaula (prueba con una golosina).

ATENCIÓN: Las cajas de cartón con agujeros practicados en su superficie son peligrosas, ya que en caso de accidente no proporcionan ninguna protección y el gato puede resultar aplastado fácilmente.

*Los perros pueden viajar tanto en jaulas especiales como permanecer sueltos. Estáte atento para evitar reacciones instintivas que pueden inducir al animal a saltar del vehículo. Mejor será prevenirlo, atándolo con la correa del collar a algún saliente del interior. Algunos establecimientos venden sujeciones para animales de compañía semejantes a cinturones de seguridad o que pueden usarse con esta misma finalidad.

                                A JIVE y VOGUE les encanta ir a la playa y a la sombrita.



*En el avión. Elige un vuelo directo sin escalas. Evita los días de tráfico intenso como épocas vacacionales o fines de semana. Reserva espacio para tu compañero peludo por adelantado, ya que las compañías aéreas tienen un número limitado de plazas para animales. No proporciones ningún alimento sólido a tu animal de compañía desde SEIS HORAS ANTES de emprender vuelo, aunque sí que es indispensable darle de beber y sacarlo a hacer sus necesidades ANTES de embarcar.

La jaula o cesta debe ser reglamentaria (la mayoría de las compañías aéreas y algunas tiendas de animales las venden).


*Si el animal de compañía es pequeño (máximo 7 Kilos), puede ir encima de tus piernas o debajo del asiento, elige una compañía aérea que permita al animal viajar contigo en el compartimento de pasajeros. El animal se asustará mucho menos y resulta más seguro que viajar en la bodega de carga.

*La compañía aérea Iberia permite que perros y gatos con un peso inferior a 7 kilos viajes en el interior de una cesta junto a su dueño, bien sea debajo del asiento, en sus rodillas, e incluso en el asiento de al lado, en caso de que no esté ocupado. Si el animal supera los 7 kilos de peso, requiere de una jaula normalizada que puede adquirirse en establecimientos especializados, y deberá viajar en la bodega del equipaje. Estas normas son válidas tanto para vuelos nacionales como internacionales.

*Si el animal debe viajar con la carga, elige exclusivamente vuelos directos sin escalas, asegurándote de viajar de noche en verano y de día en invierno (los animales pueden morir de frío, asfixiarse o morir de sofoco debido al calor, especialmente si se producen retrasos). Tú mismo o alguien de confianza debería comprobar que el animal ha embarcado satisfactoriamente, ir a recogerlo y, si el animal no llega a tiempo, proceder a la denuncia pertinente.

Las asociaciones de defensa de los animales pueden serte de mucha ayuda en estos casos. Es imprescindible que las jaulas sean espaciosas y que estén bien ventiladas y claramente identificadas (haz que el animal se acostumbre a la jaula en casa con el suficiente tiempo antes del día de la partida). En determinadas compañías aéreas pueden adquirirse las jaulas reglamentarias, pero para ello convendría informarse con suficiente antelación.

                            OPCIÓN A TENER EN CUENTA: QUEDARSE EN TIERRA



*Tus animales de compañía te quieren y te echarán de menos, así que despídete y déjalos siendo, en primer lugar, consciente de ello. No olvides nunca despedirte. Emplea un amable "quieto", mírale directamente a los ojos y dile "volveré" con firmeza. Cuando vuelvas, antes que nada, di "ya estoy aquí". De este modo tan simple se refuerza la idea de que tu partida no es para siempre.

*Sin duda, es preferible dejar a perros o gatos a salvo en casa que dejarlos en manos extrañas. No hay nada como su entorno familiar que, por lo general, resulta más seguro y reconfortante.  Haz lo posible por encontrar a algún amigo, amiga, familiar responsable (adulto) que se quede en casa o que vaya a echar un vistazo a los animales, al menos tres veces al día, y que atienda sus necesidades (por ejemplo, que les permita desfogarse). Incluso en el caso de que tengan provisiones abundantes, pueden producirse accidentes y alguien debería vigilarles a menudo.

*Asegúrate de que el cuidador o cuidadora escogido tenga cerca del teléfono toda la información importante, incluyendo números para casos de emergencia (veterinario de guardia y teléfonos donde localizarte).



*Si te ves obligad@ a elegir un centro de acogida: las clínicas veterinarias no son recomendables, ya que los animales pueden verse expuestos a enfermedades y a menudo perciben el dolor de los que les rodean, creándoles gran angustia y ansiedad. Sé muy cuidados@ al elegir un servicio de acogida (detrás de las sonrisas podría esconderse una casa de los horrores).

*Pide referencias a tus amig@s e inspecciona posibles irregularidades en asociaciones protectoras y defensoras de los animales y en la Oficina Municipal de Información al Consumidor. Visita el conjunto de las instalaciones. Si te ponen inconvenientes o te dicen  que alguna norma no permite tu inspección, no pierdas más tiempo y busca en otra parte.

¿Quien no se derrite ante este peponazo?. Pero, seamos seri@s, medita y pon atención: Adoptar a un animal es tan responsable como tener un niñ@. Hay que alimentarlos, llevarlos al veterinario, y ser conscientes de que son seres vivos que tienen sentimientos y sensibilidad, y tenerlos hasta que su vida finalice. Si no eres capaz de quedarte en tu ciudad sin ir de vacaciones: NO ADOPTES.