martes, 12 de noviembre de 2013




ALIMENTACIÓN CANINA






* El perro debe tener siempre un cuenco de agua fresca a su disposición y cambiarla por lo menos dos veces al día. El recipiente hay que fregarlo y aclararlo bien, para que no quede ningún resíduo de detergente.


* La comida debe administrarse, a ser posible, a horas fijas, preferiblemente por la noche. Un perro adulto debería comer una vez al día.






* Conviene evitar cambios de marca en las croquetas, porque provocan diarreas. Si cambiar de pienso es necesario, habrá que realizarlo paulatinamente en un plazo de diez días, y el nuevo alimento debe mezclarse con la comida habitual. El primer día se ponen dos cucharadas soperas mezcladas con el alimento antiguo. La cantidad del pienso nuevo se va aumentando de día en día, hasta terminar el décimo o día sólo con el nuevo alimento.


* El perro debe tener su propio cuenco de agua y de comida.


* Un perro no es un gato: cada animal tiene su propia comida adaptada a las necesidades de cada uno.





                             Perritos de criadero: dos en el vertedero.



* Las sobras de la mesa no son recomendables, ya que el perro necesita un alimento completo.


* Si ha perdido a su madre o ésta no puede amamantarlo, hay que alimentar al cachorro con leche maternizada, de venta en consultas veterinarias o en centros comerciales.






* La alimentación de los perros deportistas debe estar especialmente adaptada a sus necesidades.


¿Un perro puede comer de todo?


Aunque el perro puede comer legumbres, carne, arroz y pasta, hay algunos alimentos que son nocivos para su salud.


Hay que evitar en todo momento el pan, que puede fermentar, algunos quesos como el camembert. Asimismo , hay que suprimir de su alimentación las coles y los alimentos muy ácidos, como el tomate. La fruta puede irritar, en algunas ocasiones, en aparato digestivo del animal. Por todas esas razones es fundamental que el perro coma de forma equilibrada.






¿Nuestro perro puede comer lo mismo que nosotros?


* Es preferible no darle las sobras de la mesa, porque algunos alimentos pueden causarle trastornos digestivos, como las diarreas, y contribuiremos a desequilibrar su alimentación.


* El cocer la carne o dársela cruda no repercute en la salud del animal. Podemos hacerlo según sus preferencias. Antes se recomendaba cocerla para evitar riesgos de transmisión de parásitos. Actualmente no es necesario, ya que los diferentes controles sanitarios garantizan la calidad del alimento.





¿Qué clase de carne hay que darle?


No conviene abusar de la carne roja, muy rica en proteínas. El proceso de degradación en el organismo genera la producción de urea, un producto tóxico que normalmente es eliminado por los riñones. El abuso de la carne roja da origen a una fatiga de los riñones y a las crisis de urea. Por ello, se le dará carne roja una vez por semana y carne blanca el resto de los días. Los despojos no son convenientes.


¿Puede comer pescado?

Sí, pero no con demasiada frecuencia, pues hay pescados muy ricos en proteínas y otros muy grasos.






¿La alimentación tradicional constituye la mejor solución?

Hay opiniones en ambos sentidos. Actualmente, la alimentación industrial de gama alta es de excelente calidad, pero hay propietarios de perros que prefieren la opción "natural". Depende en gran medida del tiempo del que dispongamos para prepararla.


¿La comida enlatada es perjudicial para la salud del perro?

No, los trastornos intestinales se deben generalmente a un cambio brusco en la alimentación. Un perro acostumbrado a una alimentación tradicional puede tener algún problema digestivo si un buen día su humano le da una lata, ya que la flora intestinal no habrá tenido tiempo de adaptarse a este nuevo tipo de alimento, y el intestino sufrirá una irritación que dará pie a la diarrea.

Así pues, los cambios alimentarios han de ser siempre graduales, a lo largo de unos diez días en los que se añaden poco a poco los nuevos ingredientes a la comida de siempre, hasta finalizar con LA NUEVA COMIDA.







¿Se cansa el perro de comer siempre lo mismo?

No, un perro puede comer siempre el mismo menú todas las noches. El cambio de sabores es una noción exclusivamente humana. Hay quien dice que al cabo de tres días de repetir, su perro le pide otra lata, pero el motivo real es la falta de apetito debido a un exceso de alimentación.
Si la cantidad de comida está adaptada a su peso, éste tendrá hambre a la hora de comer y se contentará con un menú siempre igual. Es el dueño el que necesita cambios para su perro.






¿Se debe cambiar la alimentación cuando un perro envejece?

Los órganos del aparato digestivo (hígado, páncreas, etc.) se hacen cada vez más frágiles. El trabajo de asimilación del hígado y del páncreas puede realizarse con deficiencias, al igual que la función eliminatoria de los riñones. En tal caso, habrá que ayudar al animal y darle alimentos más digeribles. Cada caso debe ser tratado en particular, porque hay animales que no padecen ninguna de las patologías propias de la vejez. El veterinario es quien debe valorar el estado del animal y prescribir el régimen alimentario adecuado.  Como prevención, siempre es preferible dar carnes poco ricas en proteínas (pollo, pavo) o pienso de gama alta adecuado al perro.







¿Es necesario administrar un suplemento vitamínico y mineral?

Depende del ritmo de crecimiento y de la actividad realizada. Los perros jóvenes de razas grandes necesitan un complemento de calcio hasta la edad adulta, que se considera alrededor de los 14 meses en estos ejemplares. Una vez el animal es adulto, una alimentación sana y equilibrada debe ser suficiente, excepto en casos concretos (gestación, lactancia, deporte).


¿Podemos darle huesos?

Los huesos tienden a provocar estreñimiento (emisión de excrementos muy duros y gredosos), y en algunos casos, las astillas quebradas pueden irritar o incluso perforar el intestino.







¿Qué hacer para que un animal adelgace?

Debe reducirse la ingestión de alimentos energéticos (carne, arroz, pasta) y compensar el volumen de alimento reducido mediante legumbres. La práctica de alguna actividad deportiva también puede ser de ayuda, ya que el sedentarismo es uno de los principales factores que propician la obesidad en los perros. Algunas razas, como el labrador, el español-bretón u otras, son más propensas a este problema, aunque en la mayor parte de los casos el único responsable es el propietario del animal. Cuando el perro es adulto, una sola comida basta; no hay que darle ningún tipo de alimento, por mucho que nos lo suplique, fuera de horas.






¿Por qué un animal que come correctamente no engorda?


En algunos casos, el animal digiere mal los alimentos y, para compensar sus necesidades energéticas exige más comida. En esos casos es posible que exista un desarreglo pancreático, que puede confirmarse mediante un análisis de sangre, o parásitos intestinales, en cuyo caso habrá que desparasitarlo, interior y exteriormente.


¿Cómo se trata a un animal caprichoso?

No hay que ceder, por su bien. Antes que condescender, mezclaremos los alimentos bien triturados y se los daremos en pequeñas cantidades. Si no ha comido, lo tiraremos a la basura, pero al día siguiente le ofreceremos el mismo menú.







¿Hay razas más proclives a padecer trastornos digestivos?


Sí. Los collies son muy propensos a la gastroenteritis. Es importante conocer al perro para saber cuáles son los alimentos que no puede digerir.


¿Podemos darles golosinas?

Las golosinas son útiles para la educación positiva que consiste en servirse de recompensas para motivar su aprendizaje. Tienen varias presentaciones adaptadas a la edad y al comportamiento del perro, y permiten recompensarlo sin atiborrarle de azúcares. No es conveniente utilizar trozos de queso o de pan, porque engordan. Las golosinas específicas para perros tienen la gran ventaja de aportar poca energía.


¿Se puede dejar el plato de comida todo el día?


No, el perro debe comer a horas fijas y el tiempo de la ingesta no debe superar el cuarto de hora. No es saludable desde el punto de vista digestivo que el animal coma a lo largo de todo el día.






¿El perro ha de comer antes o después que sus humanos?


Aunque esta norma se respeta poco, el perro debe comer siempre después que sus amigos humanos. En las manadas salvajes, los individuos dominantes son los que comen antes. El hecho de comer primero confiere al perro un lugar dominante con respecto a su humano, y al no respetarse la jerarquía normal entre animal y humano, surgirán dificultades en la educación.


¿Un perro anciano sin dientes todavía puede comer?


Sí, porque los dientes sirven para desgarrar el alimento y masticarlo. Si le evitamos ese trabajo dándole patés muy blandos o mezclados con caldo, no habrá ningún problema.





¿Un perro puede beber otra cosa que  no sea agua?


Puede dársele leche, si la tolera bien, o caldo, pero nunca zumos ni bebidas azucaradas.










FUENTE: "Perro Feliz" (Manual de instrucciones)


AUTORA: Doctora Florence Desachy, veterinaria especialista en comportamiento canino, ha organizado conferencias destinadas a auxiliares veterinarios. Colabora con numerosas revistas sobre animales y páginas web.  Directora de colección, es autora en Editorial De Vecchi de numerosas obras sobre animales, entre las que destacan La educación del perro y una colección de 8 títulos sobre comportamiento canino.

EDITORIAL DE VECCHI, S.A. de C.V., México.











No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si tienes algún comentario no dudes en hacerlo. Gracias.