GENTE MORTÍFERA.

"Tengo un pit bull para tablas que es una bomba, tío. Está "rayao", loco 
. . .  Se merienda lo que le echen: un tosa, un fila  . . . Sale al 'scratch' como  un bólido. El muy cabrón aguanta marea hasta que engancha la tráquea. Y cuando hace presa, no hay dios que lo suelte. Hay que abrirle la boca con una estaca. Una vez tuvimos que hacer palanca entre dos tíos porque se le había encajado la mandíbula en las cervicales del otro chucho. Si tendrá fuerza, que le atas la correa al guardabarros del coche y lo arrastra, el hijoputa"

Así se explicaba en una entrevista un promotor de peleas de perros, de la región de Murcia, donde están proliferando a pasos agigantados las peleas de perros, que por otra parte redundan en beneficios cuantiosos para los apostadores y en millonarios para los promotores. Frente a las peleas modestas, donde se generan beneficios de un millón de euros, en las profesionales suelen llegar hasta los 200 millones de euros.

Según comenta un veterinario al que le llevan perros con unas heridas típicas de peleas y con mutilaciones terribles, las multas de medio millón que se imponen a los promotores de estas peleas les motivan a continuar con ellas. Son ínfimas si nos atenemos a las posibles ganancias.

Los perros de pelea, son entrenados desde pequeños, con el fin de anularles la personalidad y hacer de los animales una "máquina de matar" al servicio de sus nocivos dueños, así que:


"Cuando son cachorros se les echan gatos ó perros pequeños, tipo cocker, que dan bastante juego. Conforme van ganando en edad y confianza, hay que echarles perros más grandes. El problema de los perros callejeros es que están acobardados y no presentan batalla. Lo normal es que les echen perros de guarda y defensa, rottweiler, pastor alemán, bóxer, que son perros fuertes, pero que no están acostumbrados a pelear con otro perro, y mucho menos con un pit bull", afirma el presidente de la Protectora de Animales y Plantas (Proaniplant), en Murcia, Juan *F.

Tanto Proaniplant, como otras asociaciones defensoras de los animales y veterinarios, denuncian que se están robando perros de estas razas en fincas y chalets para servir de sparring a los de pelea. Esto no ocurre sólo en Murcia. No hace mucho nos comunicaba el propietario de un conocido restaurante de Getxo (Bizkaia) que a él le habían robado su perro bóxer en una zona ajardinada y cerrada que tiene en la parte trasera del restaurante. Nos pedía que le recuperáramos a su perro, con lágrimas en los ojos.

El Bulldog inglés fue antaño un perro adiestrado para el combate, y se convirtió por eso en la mascota del semanario político-satírico "Simplicissimus", pero hoy es un perro casero, bonachón y muy amigo de los niños. EXCEPTO PARA LOS PROMOTORES DE PELEAS DE PERROS.

A una amiga nuestra de un pueblo de Bizkaia, también le desapareció su perro pastor alemán, mientras paseaba con él. Lo llevaba sin correa. Las personas que se dedican a robar perros para utilizarlos como sparrings en las peleas de perros, suelen atraerlos mediante hembras en celo. Los machos siguen a la perra en celo, hasta un lugar donde son apresados y metidos en furgonetas. 

También nuestra amiga nos pidió que tratásemos de recuperar a ARGI, tarea sumamente difícil y peligrosa, pues los indeseables que están dentro de este sórdido mundo de las peleas clandestinas de perros, son auténticos mafiosos y asesinos, que no dudan en cometer cualquier barbaridad con toda persona que se infiltre en sus dominios (Y hay muchos que lo hacen).

La catadura moral de estas personas puede medirse por las palabras pronunciadas por el promotor de peleas con las que habríamos este comentario, y por las que dice un asistente a las mismas. Este último le recomendaba al entrevistador lo siguiente:

Pitbull con Janet, un bondadoso animal, que NO HA SIDO ENTRENADO PARA MATAR.



"Lleve cuidado con lo que escribe, porque hay GENTE PELIGROSA metida en este mundo".  Y continúa: "A las que voy son de poca monta, pero ver a dos bestias de 40 kilos enganchadas puede ser tan hermoso como una CORRIDA DE TOROS. Y estos perros están cuidadísimos, hacen deporte, comen de puta madre. Cuando hay pelea se hace una hoguera y después se les aplica ceniza en las heridas; en dos días cicatrizan".

Hasta qué punto son asesinas y sádicas las personas que se dedican a las peleas de perros, lo muestran las duras imágenes de un vídeo clandestino que hemos podido ver. El perro vencido, se tira tripa arriba pidiendo clemencia; el perro vencedor, no ataca porque capta la señal inhibidora del vencido en un intento de parar la lucha. En ese momento, el perro vencedor es azuzado con tal violencia por su entrenador que, literalmente, empuja al perro para que termine de rematar al que está herido en el suelo.

El catedrático de Etnología en la Facultad de Veterinaria de la Universidad de Murcia, D. Francisco Fuertes, es muy claro en su opinión sobre las personas que se dedican a las peleas de perros, dice de estos mafiosos y asesinos sin escrúpulos lo siguiente:


(al perro) "LO CONVIERTEN EN UN ASESINO SUS DUEÑOS, PREMIÁNDOLE PARA QUE MATE".

Sin duda, tenemos en nuestras ciudades autoridades competentes que PUEDEN terminar con esta masacre. La cuestión es:


                 
                               ¿POR QUÉ NO LO HAN HECHO YA?