martes, 27 de mayo de 2014



¡¡AQUÍ MANDO YO!!





JERARQUÍA (Problemas de la organización jerárquica) f. Variación de las referencias jerárquicas dentro de un grupo que no permite al perro situarse donde le corresponde.

* SITUACIÓN TÍPICA:  el perro recibe a veces trato de dominado y otras veces de dominante.

* LO QUE PIENSA EL PERRO: "¿Alguien puede decirme cuál es mi lugar en esta familia?".




La explicación del veterinario


Monarquía, oligarquía, democracia liberal o autoritaria, anarquía; cada familia tiene su propia organización. En cuanto al perro, este vive en una jauría regida por una jerarquía estable sin ser totalmente inmutable: ciertos individuos pueden, tras la muerte o enfermedad de otros miembros, o gracias a diversas estrategias (peleas, alianzas), ascender por la escala del poder. 




Cuando sea adolescente (los cachorros no entran en la jerarquía), el perro va a buscar en su familia humana las referencias que le permitan encontrar su lugar en la jerarquía. Para que la familia funcione en armonía, los adultos y los adolescentes deben comportarse como dominantes, indicando al perro de esta forma su condición de dominado. El desorden en la organización jerárquica comienza cuando el perro consigue una o más prerrogativas propias del dominante (alimentación, gestión del espacio, de los contactos, de la sexualidad), hasta que no hace más que lo que le plazca.




Es el caso del perro al que su humano permite dormir en su sillón entre las 16:00 y las 18:00 horas, pero más a partir de las 20:00 horas, o que la mujer le dé de comer mientras ella come en la mesa y el humano dominante rechace al perro cuando este le solicite un bocado. Ya lo traten como dominante o dominado, el perro no sabe realmente cuál es su estatutus. Esta situación ambivalente es ansiógena (crea ansiedad) y puede manifestarse en agresiones (jerárquicas, por irritación, territoriales), marcaje urinario o fecal, ladridos intempestivos, tratar de copular con los muebles o las piernas de las personas y destrucciones en ausencia de su humano dominante.




…Y todo por total desconocimiento del comportamiento del animal.


El tratamiento debe iniciarse lo más pronto posible a fin de evitar la evolución hacia la hiperagresividad. Al principio, una terapia conductual puede ser suficiente para restablecer el equilibrio. Consiste en privar al perro de todos sus privilegios de dominante y hacerlo descender en la jerarquía. La supresión de un privilegio, en la medida en que sea de gran valor para el perro, a menudo basta para que modifique la percepción de su estatus y olvide sus otros privilegios. Por ejemplo, su cama de dormir puede trasladarse del pasillo a un cuarto pequeño, o dejar que esté presente en la comida familiar antes de servirle su plato y darle de comer en un sitio apartado.




Cuando es de gran tamaño o hiperagresivo, por razones de seguridad puede ser necesario darle una medicación complementaria de la terapia conductual.





El 18 de Diciembre de 2013, en este Blogg, se efectuó una entrada sobre la AGRESIÓN.







FUENTE: "MINI DICCIONARIO BILINGÜE: ESPAÑOL/PERRO
PERRO/ESPAÑOL" (160 palabras para aprender a hablar PERRO con fluidez. Leído y aprobado por los perros)

TEXTOS: DOCTOR JEAN CUVELIER

© 2008 Larousse
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