LA DISCIPLINA: UN TEMA TABÚ

Un planteamiento sensato


Primero, dejemos claro qué queremos decir con disciplina. A menudo la gente se siente incómoda con la palabra disciplina porque inmediatamente piensa exclusivamente en castigo, que desde un punto de vista emotivo, nunca es neutro. Pero la disciplina tiene un significado mucho más amplio. La palabra también tiene una connotación positiva, en especial cuando analizamos su etimología. Disciplina está relacionada con la palabra disciple, "quien sigue", que a su vez proviene de la palabra latina discere, que significa "aprender". Esto implica que la buena disciplina deriva de la buena enseñanza y del buen liderazgo; los propietarios responsables, como los buenos profesores y líderes, adaptan la disciplina a las necesidades de los propios perros.

La buena disciplina tiene lugar en varios niveles distintos. En un programa de adiestramiento de obediencia regular, la disciplina se da con naturalidad a medida que se empieza a refinar, repetir y reforzar los ejercicios básicos ya aprendidos de una forma general. En este contexto, el "castigo serio" es poco frecuente. Aunque sea repulsivo (por muy ligero que sea) y técnicamente se describa como "castigo" en la ciencia del comportamiento, la realidad es que este denominado castigo también cubre un amplio espectro. Existe una vasta diferencia entre un "no" recortado y una fuerte bofetada debajo de la barbilla.

Perro abandonado por no saber absolutamente NADA sobre comportamiento animal.


En sentido estricto, ambos son castigos positivos, es decir, se aplican para que en el futuro el perro no repita un comportamiento determinado. La situación y el contexto determinan qué "castigos" son apropiados y cuándo proporcionarlos. La norma que seguimos nosotros es emplear siempre la mínima fuerza para cambiar el comportamiento e integrar con firmeza la lección en la mente del animal.

Por desgracia, la palabra castigo presenta una procedencia con tantos altibajos que es complicado utilizarla de un modo claro y emocionalmente neutro. Diga "castigo" y la mayoría haremos una mueca de dolor. También tendemos a creer que se trata de una consecuencia por un mal comportamiento ocurrido después del incidente en cuestión. Los criminales son castigados por lo que hicieron en el pasado. En una relación con el perro (un animal que vive casi por completo en el presente), el castigo tras el incidente no sólo es inútil, sino también destructivo.

Por estas razones, nosotros preferimos distinguir entre acciones repulsivas leves y las más graves. Por ejemplo, utilizamos "correcciones" para describir la disciplina sutil que se lleva a cabo en el adiestramiento de obediencia convencional y en la vida cotidiana. "Castigo" describe una disciplina verbal y física con más fuerza que va asociada a distintos problemas conductuales. Para la gente esta terminología es más aceptable y, además, creemos que es justa con la experiencia ordinaria.

                                                Un perro con suerte



Con suerte, la cantidad de veces en que sea necesario administrar una acción seria a su perro será muy reducida, y sólo para las infracciones más importantes. Con más frecuencia, la disciplina en la que se apoye usted implica correcciones verbales y con correa bien sincronizadas que redirijan y guíen al perro, lo cual refina su comprensión y refuerza la percepción de su liderazgo.

                                     Fotografía: Daniel Fernández


Tenga en cuenta que este tipo de correcciones son parte natural del adiestramiento de obediencia. La disciplina fundamentada no está reñida con el contexto del adiestramiento. El problema con los planteamientos que hemos mencionado al inicio de este capítulo es que la acción disciplinaria se produce cuando menos se lo espera; no está relacionada con un programa dedicado al adiestramiento de obediencia. No llegamos a contar el número de veces que un propietario ha dicho algo como
"no me interesa que pasee a mi lado o se siente, sólo quiero que deje de gruñir", con la esperanza de que nosotros le proporcionemos una técnica disciplinaria mágica. Esto es una insensatez y, además, es poco eficaz, dado que no soluciona el problema y es perjudicial para la relación.

A menos que un  propietario esté criando un cachorro o un perro mayor en un clima de adiestramiento positivo adecuado a la edad del perro, cualquier uso de la disciplina tiene que ser equilibrado. El adiestramiento es el camino que hay que seguir. La escuela británica de adiestramiento canino de la Royal Air Force tiene un dicho que cualquier aspirante a adiestrador debería tener en cuenta: un adiestrador siempre termina con el perro que se merece.  Cuando están reñidas con el adiestramiento, las correcciones son perjudiciales porque no le proporcionan al perro la comprensión de lo que usted quiere que haga.

Siempre es necesario que la disciplina vaya seguida de algún tipo de orden  de adiestramiento positiva que restablezca el liderazgo a la vez que deje claro al perro lo que usted pretende. Los propios ejercicios tradicionales son una forma humanitaria de reforzar el liderazgo y mejorar la disciplina. 

El perro (y los demás animales) no entienden el idioma humano, para ellos las palabras no tienen ningún significado, sin embargo dominan a la perfección el lenguaje corporal. Se esfuerzan mucho por aprender… ten paciencia con ellos y hazte "soci@" del REFUERZO POSITIVO.


Colocar a un perro en un échate-quieto prolongado, por ejemplo, no sólo le da el control que necesita en ese momento, sino que también refuerza en la mente del perro el hecho de que usted es el "jefe de la manada"

FUENTE: "CÓMO SER EL MEJOR AMIGO DE SU PERRO" (El manual de adiestramiento clásico pata los propietarios de perro)


AUTORES: Los Monjes de New Skete.  Estos monjes han conseguido renombre internacional como criadores de pastores alemanes y como destacados adiestradores de perros de todas las razas. Su método único de adiestramiento canino, desarrollado y refinado durante tres décadas, se basa en la filosofía de que "entender es la clave para la comunicación, la compasión y la comunión" con su perr@.

Copyright de la edición original: © 2002 The Monks of New Skete
© 2014 Monks of New Skete
Editorial Paidotribo
Les Guixeres
Badalona, Barcelona (España)