VIVIR EN EL DIFÍCIL  MUNDO HUMANO

El instinto de supervivencia en un mundo humano. El perro se esfuerza por agradar a su humano, pero no comprende nada su mundo, por eso es abandonado y está a la espera de la adopción o el sacrificio.


Para un perro, todo tiene que ver con la supervivencia, no solo la suya, sino también la de toda la familia. Todo está subordinado a la supervivencia de la familia, y si usted se fija en su propia familia, eso es válido también para nosotros. Lo demás no importa.

                             Perro abandonado por ser viejo

Todos los perros enfocan esa cuestión con la misma actitud, ya sea uno de los corgis de la reina de Inglaterra, el "perro-bolso" de una aspirante al estrellato de Hollywood, un perro mestizo que duerme a la intemperie o la mascota de su familia. Los perros han sido programados por miles de años de evolución para sobrevivir, igual que nosotros.

Perro abandonado por actuar como un perro y no como un humano

Si se abandona a un perro en medio del bosque, en la mayoría de los casos sobrevivirá; en seguida se darían cuenta de que su humano no va a aparecer a llevarle su comida. El perro pasaría sin  solución de continuidad a la modalidad de supervivencia y empezaría a cazar y a buscar comida para sobrevivir.

                Galgos abandonados, esperando adopción o sacrificio

Es posible que acabara juntándose con otros perros y formara una manada para apoyarse mutuamente. En cambio, nosotros, los seres humanos de Occidente, nos veríamos en un gran apuro; no resulta fácil vivir sin todos nuestros artilugios y nuestras comodidades. Hemos perdido muchas habilidades y dependemos de demasiadas opciones fáciles.

El mundo en que vivimos es totalmente ajeno al perro: los perros no entienden de cerraduras en las puertas, ni saben que los individuos que nos rodean normalmente no suponen una amenaza. En nuestras estructuras comunitarias, tendemos a vivir cerca de nuestros vecinos, lo que puede resultar inquietante para algunos perros. 

                   Perra paralítica abandonada en Salta (Argentina)

Dado que hoy en día nuestros perros no deambulan libremente, como hacían hace cincuenta años, muchos de ellos se vuelven territoriales. No entramos y salimos de las casas de nuestros vecinos, ya que en estos tiempos muchos de nosotros ni siquiera los conocemos, de forma que últimamente el mundo del perro se ha ido volviendo cada vez más insular y aterrador.

 El "peligroso" pitbull, torturado por su humano. La primera foto corresponde a su recuperación y esperando que alguien lo adopte, si nadie lo adopta será "eutanasiado"

No tienen ni la capacidad ni la libertad de deambular ni de huir de lo que les asusta cuando lo necesitan, ni de tomarse las cosas a su propio ritmo.

Les presionamos para que se adapten a nuestra sociedad mucho más que cualquier otro animal que hayamos domesticado.

                                           Perro abandonado

Esperar que otras especies comprendan el mundo en que vivimos hoy en día es pedir demasiado; nos corresponde a nosotros adaptar nuestras capacidades de comunicación para demostrar a los perros que controlamos la situación y que están a salvo en nuestras manos, que la protección de la manada o de la familia es responsabilizad nuestra. Nosotros somos los que tomamos las decisiones, y por tanto podemos aliviar a los perros de la presión que sienten. Tenemos que demostrarles que también vamos a estar ahí para dirigirles, y que ellos solo tienen que seguirnos.

El "peligroso" pitbull al que su humano ha cortado la pata delantera y la trasera de la parte derecha.

Si les damos esa seguridad, los perros se relajarán a nuestro lado, sabiendo que están protegidos y seguros. Entonces podremos asumir la responsabilidad en esas situaciones que ellos no comprenden, que les asustan o que no están capacitados para afrontar de una forma aceptable en nuestra sociedad.

FUENTE: "¡¡¡MI PERRO NO ME ENTIENDE!!! (Una guía fácil para comprender y corregir el comportamiento de su perro)

AUTORA: CAROLINE SPENCER, famosa adiestradora británica de perros con más de veinticinco años de experiencia.

© Caroline Spencer 2013

El derecho de Caroline Spencer a ser identificada como la autora de esta obra ha sido confirmado por ella de acuerdo con a la ley de Copyright, Diseños y Patentes de 1988.

© Alianza Editorial, S.A., Madrid, 2013