jueves, 3 de abril de 2014



"EL GATITO MUERDE PARA ENDURECER SUS DIENTES"


IDEA ERRÓNEA!





Durante sus juegos el gatito salta sobre un juguete antes de morderlo y arañarlo con sus patas delanteras. También le gusta mordisquear tu dedo índice y la mano. Tú se lo permites


¡CUIDADO, ESE JUEGO PUEDE SER PELIGROSO!


Para comprender mejor


Son demasiadas las personas que dejan que su gatito les muerda, creyendo que así, el pequeño endurece sus dientes. Sin embargo, este comportamiento no está asociado a la erupción dental, puesto que la dentición de leche se ha completado al mes de vida y no será reemplazada hasta tres o cuatro meses más tarde.




Para interactuar con un gato de esta forma, tenemos que conocerlo muy bien, porque el animal muerde sin presionar. Hay que enseñarle a que no nos muerda con todas sus fuerzas.


¿Qué puedes hacer?


Los juegos con buenos para el buen desarrollo físico, psíquico y comportamental del gatito. Por lo tanto, es necesario animarlo sabiendo, eso sí, que debe aprender a no sobrepasar ciertos límites, controlando sus mandíbulas y garras.





Una forma de jugar con el gato, sin poner en peligro nuestras manos.


La madre gata para castigar a sus cachorros les da pequeños golpecitos en el hocico o toma su cabeza entre las patas delanteras y araña 
(sin uñas) su vientre con las extremidades posteriores. Para detener un mordisco o los arañazos en el curso del juego, puedes darle con el dedo índice en el hocico (uno o varios golpecitos), o bien tumbarlo de costado, y con la otra mano rascarle enérgicamente el vientre, SIN VIOLENCIAS.






Si el gato es huérfano, el aprendizaje es tanto o más importante y difícil: lo ideal sería tenerlo junto a un gato adulto equilibrado o un perro  (habituado a los gatos) que les servirán de educadores.

  



Morder y arañar se incluyen dentro del comportamiento de juego y se instauran en el gatito desde el primer mes de vida, durante … toda su vida. Para los felinos, los dientes y las uñas son las dos principales armas de ataque, de defensa y de caza. Los cachorros aprenden a servirse de ellos y a agudizar sus reflejos mientras juegan con los objetos, con otros individuos, con su madre o con presas vivas que les trae ésta última. Deben saber controlar sus mandíbulas y sacar o esconder las uñas según sea necesario.






La madre es una educadora de primer órden: en el momento que es mordida o arañada por uno de sus retoños, ella le castiga enérgicamente desatendiéndole. El gatito entiende con rapidez que debe evitar morder y aprende a esconder sus garras en las luchas que tienen lugar durante el juego con sus hermanos y hermanas. Este aprendizaje que se inicia antes del destete debe continuarse después por el propietario, de lo contrario se corre el riesgo de tener más adelante un pequeño tigre incapaz de jugar sin hacer daño.






ENTRE NOSOTROS: Si tu gatito está siempre nervioso, duerme poco, come mucho y le gusta considerar tus manos y pies como presas, pregunta a tu veterinario, porque este problema de comportamiento necesita tratamiento.




No se debe permitirque este comportamiento vaya a más. HAY QUE PARARLO.

















Quitar suavemente nuestra mano de las garras y boca del gato y no hacer caso del minino. Cada vez que el gato repita este comportamiento, su compañero humano debe dejarlo y marcharse.
Sin gritos ni violencias, que sólo empeorarán la situación.










FUENTE: "100 IDEAS FALSAS SOBRE EL GATO" (Comportamiento, alimentación, salud…)

AUTORA: Doctora Veterinaria Laetitia Barlerin, diplomada en la Escuela Nacional de Veterinaria de Alfort y titular de un DEA (Diplôme National de Master) en comportamiento animal. Además del ejercicio de su profesión, comparte su pasión por los animales con un gran número de personas con un programa radiofónico dominical sobre los animales.

Como periodista, colabora con diferentes publicaciones profesionales 
(L'Action Vétérinaire, La Dépêche Veterinaire…) y revistas de animales (30 millones de amigos…).

© 2009. Edición en español.
Grupo Asís Biomedia, S.L. Zaragoza, España.

Nota del editor:

La información recogida en esta obra refleja las opiniones y experiencias de la Doctora Laetitia Barlerin y puede no corresponder con las recomendaciones técnicas del departamento científico de Royal Canin.

Libro gratuito expuesto en consultas veterinarias, por gentileza de 
ROYAL CANIN.




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